martes, 24 de abril de 2007

Capitulo 13: Y el tiempo no para (relata Moralez - dibuja Marcos "Laky" Luc)


Hacía horas que esperaba que el fenomeno come-queso me avisara cuando debía actuar, me estaba cansando, sabía que no podía confiar en una rata. Pasaba el tiempo y no tenía noticias de Egro, tenía a mis hombres al pedo como cenicero de moto, se la pasaban jugando al ajedréz, yo me estaba cansando y para colmo de males el escritor se la agarró conmigo. “¡Me tienen las bolas llenas!” me gritó “¡Movete vos con todos esos pelotudos que tenés de empleados, ya la gente se pone hincha pelotas y me pregunta que carajo es el Choripan de Plata, que paraqué sirve la cajita con los $10 y yo no se que hizo el otro pelotudo con los cubiertos que también preguntan giladas como esas! ¡Mové el ocote que esto no es Lost!” estaba sacado, yo le había recomendado que no contestara los comentarios que dejaba la gente, o que firmara como anónimo, pero claro, él no da bolilla y ligo yo que soy un invento de él. La seguía “y traten de buscarse alguna palabra rara o algún tic que también se quejan de que todos relatan igual” se prendió un pucho y se fue rezongando “¿Quién me manda a mi a hacer un blog? ¿Porqué no miro páginas porno cuando estoy en internet en vez de escribir estas pelotudeces?” y salió de su cabeza.

¡Adelante mis valientes! - les grité, se me ocurrió que si comenzaba a hablar como la Solita Silveira contribuiría a la diversidad de de relatos, pero nadie me dió bola.
¡Muevan el ocote manga de universitarios mimados y amanerados intelectualóides! - arengué y capté su atención.
Espere jefecito, le hago un jaque pastor y vamos.
¡Qué vas a hacer jaque pastor vos! si cuando vos pensas una jugada yo estoy tres movimientos adelante tuyo. - gritó el que jugaba con las negras.
Pateé el tablero (literalmente) y subimos a los vehículos. “¡Al hotel Edén!” ordené y salieron haciendo chirriar las ruedas, uno de ellos hizo marcha atrás, bajó el vidrio de la ventanilla “perdón jefecito, pensé que ya había subido”.


Relata Krillich

el pasillo nunca llegaba a su fin, ni siquiera alcanzaba a divisarlo, tenía que llegar a la puerta que tuviera la hora y la fecha a la cual me habían mandado, tenía unas ganas de mear que parecían dos. Estaba en una puerta que decía “1500 d.c” y me mandé. para mi sorpresa y para complicar el estado orinal que me aquejaba, del otro lado de esta puerta había otro pasillo con mas puertas, empezaba desde el 1599, intente abrir una y no pude, ya comencé a correr con las rodillas chocando entre sí. para mi sorpresa (again), al llegar al año 1582 la puerta estaba abierta, obvio, del otro lado había más y más puertas y me cansé, la del 4 de octubre recibió un potente, constante y cálido chorro amarillo que se fué metiendo por debajo de la misma. Me relajé, habré estado orinando unos 5 minutos, me senté contra el 3 de octubre, día que estaba al frente de la dichosa abertura recientemente orinada. Algo no encajaba, del 4 seguía inmediatamente el día 15 “Se habrán confundido” pensé, me levanté y volví al pasillo principal, volví a caminar tratando de encontrar nuestras épocas.
-¡Krillich! - el pasillo se curvaba delante mío, de allí apareció un sujeto que gritaba mi nombre.
¿De dónde salist...? - mis ojos no podían creer lo que veían – vos sos el...
-si, el Teto Medina ¿cómo estás? te estabamos esperando.
-¡Uh! había dicho que no iba a orinar más, el tiempo, los días que faltan en 1582, ahora vos – no dejaba de rascar mi cabeza... él no dejaba de rascar mi cabeza.
-Vamos Krillich, te voy contando en el camino ¿Querés un poquito de whisky? - sus ojos, de repente, me perecieron tan luminosos, su bigote tan prolijo.
-Teto, gracias, para mi vos eras el mejor de Ritmo de la Noche, el pelado Jacubovich era un gil al lado tuyo.
-Acá estamos todos los que nos quedamos en el tiempo, mirá, allá está la señorita Lee de 6 para Triunfar, ese de ahí es Marcelo Dosantos, siempre tenemos que cuidarnos porque Mirtha Legrand quiere meterse, pero ella no se quedo en el tiempo, cambió de dirección y la parca no la encuentra nunca – el Teto Medina ¡Que groso!
-Perdón Teto, pero tengo que llegar al 2007 y estamos por el 1800, no falta mucho, pero ya me retrasé bastante.
-No Krillic, acá no pasa el tiempo, sería como el País de Nunca Jamás pero sin el putito de Peter Pan – me explicó el Teto “¡Que maestro!” pensaba yo mientras le daba tragos y más tragos al whisky y él proseguía – te mandaron mal, tu hermano está en el zotano del Careperro.
-¡Esas ratas y la con..!
-¡No! los Marrones no saben, ellos creen realmente que Egro y Moisés están muertos, el Careperro tiene una de las mitades del Choripan de Plata (ahí tienen manga de rompe pelotas), y si bien no es un ser malvado, no confía en nadie, él sabe que si se unen las dos mitades el mundo corre peligro, tu hermano no va tras las dos mitades para unirlas, por el contrario, la misión de verdad verdadera es separarlas aún más.
-¡Dejáme de joder! choripan de plata, si no fuera por el whisky ya me hubiera ido al carajo hace rato, apenas me encontré con la tilinga del hotel – mi visión se ponía borrosa y el Marce Dosantos me alcanzaba otra botella.
-¡Tu helmano cole peliglo! - me gritó la señorita Lee.
-ok, tengo una botella llena ¿Qué tengo que hacer?
-Tenés que volver a buscar a los seres Marrones, ellos con sus poderes pueden llevarte al zotano de Careperro, el portal de piedra es inestable, pero ellos en forma de ratas lo manejan bastante bien, Careperro hizo que Alejandra creyera que tu hermano y su compañero murieran - ¡el Teto Medina! ¡Que maestro!
-Ok, me vuelvo Marce, saludos a Codevila – y volví sobre mis pasos... el Teto Medina... ¡que grande!

Próximamente:
de los creadores, guionistas, productores y doctores de
"Las Dos Mitades del Choripan de Plata"
llega
"LOS RECOVECOS DEL ARMARIO"